martes, 9 de marzo de 2010
Un día en BCN
21:59:00 |
Publicado por
BlackJack |
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Ayer por la mañana, mi padre y yo viajamos a Barcelona. Lo hacemos cada pocos meses por temas que no vienen ahora al caso. Lo paso muy bien con mi padre a pesar de lo rutinario del viaje. Volamos a Barcelona, comemos por ahí (generalmente en Ca'n Culleretes o en el Quinze Nits), damos un paseo, atendemos nuestros compromisos y volamos de vuelta a Palma.. Hablamos mucho. No siempre se tiene la suerte de aprender de una persona como él.
Pues ayer nos pilló la tormenta de nieve al poco de salir de donde habíamos estado unas horas por la tarde. Cuando llegamos a nuestra cita, nevaba, si, pero muy suavemente. Tan suavemente que las Ramblas, a pesar del poco ambiente debido al frío, parecían tener un algo diferente.
Habíamos terminado con nuestros asuntos a eso de las 17:45 de la tarde y teníamos el vuelo de regreso a las 19:10, así que teníamos tiempo más que suficiente para coger un taxi y llegar al aeropuerto.
Pero fue sonar las 18:00 y empezar a soplar un viento de mil demonios, empezó a caer la nieve que ríete tú de la cellisca de Navacerrada o Cercedilla, o incluso de los Alpes. En unos pocos minutos, se oscureció el cielo y se puso a descargar de una manera como ni yo ni mi padre habíamos visto nunca.
La nieve empezó a acumularse sobre la acera. Intentar caminar sobre aquello era poco menos que una misión suicida. Intenté encontrar un taxi y no había manera. La nevada cada vez era más fuerte. Ni un solo taxi.
Como todos sabeis, lo de andar me cuesta un poco, pues con los zapatos llenos de nieve, más aún.
A eso de las 20:00 y sin haber parado de andar de acá para allá buscando un taxi bajo la nieve, con mi pobre padre que a sus ochentaytantos ya no está para según que trotes, y habiendo perdido ya el vuelo ... ... ¡milagro! un taxi. Nada más abrir la puerta y decirle que vamos al aeropuerto, nos dice que no puede llevarnos hasta allí porque los accesos están cerrados por la nieve.
El segundo taxi que pasó nos dijo lo mismo. Así que no quedaba otra que buscar un sitio para dormir.
Hablando con mi hermana menor, nos buscó un hotel que quedara cerca de donde estábamos. Habíamos salido de la calle Muntaner a la altura de la calle Londres, y estábamos en Vía Roma con Comte d'Urgell (una respetable caminata). Nos arregló una reserva en un hotel de la calle Viladomat (Gracias, María. Gracias Internet) y lo primero que hicimos al llegar, fue empezar a darle secador a la ropa y sobre todo a los zapatos.
Creo que en toda mi vida no he pasado más frío. La ropa llegó a secarse, no así los zapatos que esta mañana todavía estaban chorreando.
Un poco repuestos de la travesía por la nieve como un Amundsen cualquiera y después de ver las noticias por la tele, mi hermana nos reservó otro vuelo para el mediodía de hoy.
Esta mañana amanecía Barcelona con un día estupendo y casi como si nada hubiera pasado. Un sol radiante y un aire fresco que invitaba a pasear.
El regreso se ha producido sin mas problemas (afortunadamente).
Os dejo unas fotos de cuando todavía no había arrancado la tormenta. Una vez arrancada no era capaz de sacar el móvil del bolsillo.
Este video que he encontrado en Youtube, dará una idea aproximada de la que cayó ayer en la Ciudad Condal.
Esta mañana Barcelona amanecía tal que así. Algunos restos de nieve pero casi ni rastro de lo de ayer.
Así que como decía Open GT en el post anterior, nieva en Barcelona... algo que no ocurre todos los días!.
¡¡¡ Y va y me pilla a mi !!!
Escuchando.
Pues ayer nos pilló la tormenta de nieve al poco de salir de donde habíamos estado unas horas por la tarde. Cuando llegamos a nuestra cita, nevaba, si, pero muy suavemente. Tan suavemente que las Ramblas, a pesar del poco ambiente debido al frío, parecían tener un algo diferente.
Habíamos terminado con nuestros asuntos a eso de las 17:45 de la tarde y teníamos el vuelo de regreso a las 19:10, así que teníamos tiempo más que suficiente para coger un taxi y llegar al aeropuerto.
Pero fue sonar las 18:00 y empezar a soplar un viento de mil demonios, empezó a caer la nieve que ríete tú de la cellisca de Navacerrada o Cercedilla, o incluso de los Alpes. En unos pocos minutos, se oscureció el cielo y se puso a descargar de una manera como ni yo ni mi padre habíamos visto nunca.
La nieve empezó a acumularse sobre la acera. Intentar caminar sobre aquello era poco menos que una misión suicida. Intenté encontrar un taxi y no había manera. La nevada cada vez era más fuerte. Ni un solo taxi.
Como todos sabeis, lo de andar me cuesta un poco, pues con los zapatos llenos de nieve, más aún.
A eso de las 20:00 y sin haber parado de andar de acá para allá buscando un taxi bajo la nieve, con mi pobre padre que a sus ochentaytantos ya no está para según que trotes, y habiendo perdido ya el vuelo ... ... ¡milagro! un taxi. Nada más abrir la puerta y decirle que vamos al aeropuerto, nos dice que no puede llevarnos hasta allí porque los accesos están cerrados por la nieve.
El segundo taxi que pasó nos dijo lo mismo. Así que no quedaba otra que buscar un sitio para dormir.
Hablando con mi hermana menor, nos buscó un hotel que quedara cerca de donde estábamos. Habíamos salido de la calle Muntaner a la altura de la calle Londres, y estábamos en Vía Roma con Comte d'Urgell (una respetable caminata). Nos arregló una reserva en un hotel de la calle Viladomat (Gracias, María. Gracias Internet) y lo primero que hicimos al llegar, fue empezar a darle secador a la ropa y sobre todo a los zapatos.
Creo que en toda mi vida no he pasado más frío. La ropa llegó a secarse, no así los zapatos que esta mañana todavía estaban chorreando.
Un poco repuestos de la travesía por la nieve como un Amundsen cualquiera y después de ver las noticias por la tele, mi hermana nos reservó otro vuelo para el mediodía de hoy.
Esta mañana amanecía Barcelona con un día estupendo y casi como si nada hubiera pasado. Un sol radiante y un aire fresco que invitaba a pasear.
El regreso se ha producido sin mas problemas (afortunadamente).
Os dejo unas fotos de cuando todavía no había arrancado la tormenta. Una vez arrancada no era capaz de sacar el móvil del bolsillo.
Este video que he encontrado en Youtube, dará una idea aproximada de la que cayó ayer en la Ciudad Condal.
Esta mañana Barcelona amanecía tal que así. Algunos restos de nieve pero casi ni rastro de lo de ayer.
Así que como decía Open GT en el post anterior, nieva en Barcelona... algo que no ocurre todos los días!.
¡¡¡ Y va y me pilla a mi !!!
Escuchando.
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6 indivíduos/as que han dicho la suya:
Primis, hejejejeje. no es cierto.
Pues al parecer se enojaron muchos por tus comentarios a las hijas de Zapatero, pero total, van y vienen.
Pues el blog se ve mejor, mucho mas amplio pero cuida que no se vea sucio ( no que se vea ahora asi ).
Saludos y Salud desde Monterrey, Mexico, que aqui tenemos nuestros propios problemas ( y muy serios ).
PD: Deverias de invitar a la gente a que comparta sus aventuras dentro del area de Sistemas y Soporte.
Saludos Alberto.
Los que se enfadaran con lo de las hijas de Zapatero tuvieron dos problemas: enfadarse y desenfadarse.
Me alegra que te guste el nuevo diseño. Como dije, estoy abierto a sugerencias.
Si. Supongo que lo que tenéis por tu tierra no debe ser fácil de llevar, pero no queda otro remedio que cargar con ello.
Con respecto a lo de invitar a la gente a compartir sus aventuras y desventuras, lo llevo haciendo desde el principio del blog. Si te fijas bien, en el margen derecho hay un apartado de colaboración y contacto.
Saludos desde Mallorca.
¿Tampoco funcionaba el servicio de cercanías?
Sí que se complicó la cosa.
Yo nunca voy o vuelvo del aeropuerto de BCN en otra cosa que no sea el tren... tengo malas experiencias en taxi o bus.
Pues me imagino que por la edad de tu padre se te complicaba usar el metro, y luego el tren hasta el aeropuerto.
Aparte me parece que lo debes tomar como una experiencia inolvidable y que la has vivido junto a tu padre, algo para que recuerdes más adelante como una anécdota una aventura.
Cierto, problemas los que hay en otras regiones del mundo, nos quejamos demasiado por tonterías, cuando hay medio mundo muriendo de hambre, guerras, etc.
Es lo que tiene el confort, nos hace débiles.
El metro si funcionaba, no así el tren, que estaba fuera de servicio.
La red de cercanías estuvo inoperativa durante toda la noche debido a la intensa nevada.
Miralo bien, tengo entendido que el ayuntamiento se hará cargo de toda aquella gente que se tuvo que quedar en la ciudad por el atasco. No sé si será cierto o no, pero si os pagan ni que sea el hotel....
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